lunes, 31 de octubre de 2011

¡¡Esta Noche nos Atacan los Monstruos!!

Sí, ha llegado la noche de Halloween y nos rodean  multitud de criaturas sobrenaturales salidas de los oscuros rincones del infierno.

Pero no pasa nada porque tenemos algo para que los espíritus no la tomen con nosotros: CHUCHERÍAS.

Eso sí, no son unas chucherías cualesquiera, sino perfectamente presentadas en bolsas de papel personalizadas que hacen las delicias de los pequeños monstruitos. Además, van acompañadas de fantasmas.



Dan mucho miedo, ¿verdad? Y por dentro están de muerte.

Espero que os haya gustado lo idea y que la tengáis en cuenta porque en el futuro os mostrare más ideas de este tipo en la prevista sección de TIENDA.

Hasta pronto.

Bolsas de Papel

Muy buenas a todos.

En esta nueva sección llamada PAPELEANDO descubriremos que cosas maravillosas se pueden hacer con papel.

En esta primera visita a PAPELEANDO se van a preparar unas bolsitas de papel que pueden ser muy útiles a la hora de hacer regalos o, simplemente, para llevar algunos efectos personales. Para que resulte más fácil de entender es muestro unas fotillos y os cuento el paso a paso:



1 --> Tomamos un trozo de papel de un tamaño acorde al objeto que queremos que contenga.
2--> Lo doblamos de manera que los dos extremos se solapen y lo pegamos con cola.
3--> Se hacen unos dobleces iguales en los extremos cerrados y se pliegan con la arista hacia dentro.
4--> Doblamos dos veces (realizando dobleces de igual tamaño) uno de los extremos abiertos.



5--> Esta parte es más complicada de explicar, pero espero que os sirva la foto. Abrir el extremo que se dobló dos veces y presionar el interior para abrirlo.
6, 7--> Cerrar y pegar las solapas de lo que seré el fondo de la bolsa y ... ¡¡YA ESTÁ LISTA!! (8).

Espero que os haya gustado, lo hayáis entendido y podáis hacer vuestras propias bolsitas personalizadas.

Hasta pronto.

domingo, 16 de octubre de 2011

Con una Lata y Lápices Viejos

Ya sabemos que todo tiene un final, pero no siempre tiene que ser el que se supone desde su origen.

Cuando las cosas pierden su utilidad no hace falta que sean desechados, sino que se les puede dar una utilidad totalmente nueva.

Y eso es lo que ha ocurrido con esta vieja lata de tomate frito, unos lápices usados (de esos que dejas de usar porque te duelen los dedos al cogerlos), y unos papeles, lazo y cola termofusible:



Todos juntos se han convertido en un original lapicero...



Y la verdad es que no ha sido difícil:
  • Lo primero es dejar bien limpia la lata, no sea que cuando tengamos los bolígrafos dentro empiecen a salirnos cucudrulos de ahí.
  • Para forrar la lata he usado cartón corrugado negro que tenía guardado de una manualidad anterior. La plantilla la puedes hacer deslizando la lata sobre un trozo de papel y marcando con un lápiz. Asegúrate de que haces la plantilla de manera que no solape el papel, ya que es muy grueso y podría afear el trabajo. Después traslada la plantilla al cartón corrugado y fija éste a la lata con cola termofusible.
  • Lo anterior era lo más difícil, porque ahora solo queda colocar el lazo y pegar los lápices con la pistola de cola donde más te guste.
Ahora inténtalo tú con tus latas o dale nueva vida a lo que creas que ya no vale.

Hasta pronto.

Un pequeño bodegón

En la cocina también se pueden poner plantas.

De hecho es un lugar muy agradecido para poner helechos porque suele ser una estancia más oscura que el resto y también suele ser más húmeda.

El caso es que me he animado a poner plantas en la cocina y he comprado un culantrillo (Adiantum capillus-veneris)



Y he montado un pequeño bodegón en un rincón de la cocina. Espero que os guste y nos vemos pronto.

Aire Nuevo en la Terraza

Ya sabéis que me encanta la jardinería. Y el hecho de no tener una gran extensión no implica dejar de tener plantas. Así que he vuelto a mi vivero favorito a por nuevas adquisiciones:

Un brezo, perteneciente a la familia de las ericáceas y, sinceramente, no sé qué es la otra planta.

Unos Pennisetun setaceum la mar de bonitos. En particular, me encantan las gramineas por su aspecto etéreo:

Un poco de tomillo (Thymus vulgaris) para que de buen olor en la terraza y un Ficus repens, que me recuerda al bosque en otoño:



Y un ejemplar de Bidens ferulifolia, o verbena amarilla, que da un toque de contraste con las paredes color lavanda de mi pequeña terraza:



Con estas plantas he montado una composición en uno de los rincones cercanos al balcón utilizando una pequeña silla color magenta...



Y el resultado es una colorista mezcla vegetal que nos recuerda que no siempre se tiene que buscar un orden, sino que el caos también es un elemento que comtribuye a la belleza paisajística:






Espero que os sirva de algo mi composición. Aunque solo sea para que os entren ganas de tener flores. Hasta pronto.

lunes, 10 de octubre de 2011

La Pecera de Corti

¿Os habéis dado cuenta de que en muchas ocasiones se usan objetos destinados para una cosa dándoles una utilidad totalmente distinta?

Es lo que me ha pasado a mí con el jarrón Bladet de Ikea...


En mi caso, se ha convertido en una maravillosa pecera. ¡¡Sí, sí!!, una pecera. Puede resultar obvio pero estuve dándole muchas vueltas hasta decidirme.

No quería un enorme acuario rectangular ni la típica pecera de globo. Así que cuando vi el jarrón se me encendió la bombilla. Y con un jarrón, un foco de luz (en realidad, un foco de pinza para escritorio con una bombilla de bajo consumo pero luz muy blanca, es decir, con un número de lumens o grados kelvin alto),  un sencillo sistema de filtración (en realidad lo más caro de la pecera) y un poco de arena, plantas y decoración...¡TACHAN!,nació mi pecera:



Elegí guppys para el acuario porque son resistentes, versátiles y muy coloridos. Y tan bien me ha salido que a las dos semanas de tenerlos me encontré con una sorpresa...



¡Tengo pescaditos! Lo que no sé cuanto durarán porque en esta especie existe el canibalismo. En fin, nada es perfecto.

Así que ya sabéis, todo lo que veáis se puede convertir en OTRA COSA.

Hasta pronto.

Unas Mesitas Muy Socorridas

La verdad es que en ocasiones hacen falta muebles que no podemos encontrar por cuestión de medidas u otras características.

La cosa se convierte en un problema cuando son muebles complejos, pero si son proyectos sencillos nos podemos animar a hacerlos nosotros mismos sin que suponga un gran desembolso monetario. Ese es el caso de esta mesita que fabriqué hace poco para mi terraza...



En realidad fueron dos mesitas las fabricadas y no costaron más de 10 euros ambas (el desembolso fue mínimo; un dato . . . RECICLAD, RECICALD, RECICLAD). Con unos listones y tableros, herramientas básicas (que no es necesario comprar, sino que se pueden utilizar gratuitamente en los grandes centros de bricolaje) y restos de pintura que se tengan por casa podemos fabricarlas de manera fácil y limpia. Eso sí, el estilo depende de cada uno.Yo preferí algo similar a los muebles indios, de madera maciza y muy coloridos...



Me vinieron genial las dos mesitas por cuestiones de espacio (no encontraba nada del tamaño adecuado) y el resultado es el siguiente...



A mi me parecen muy bonitas y coloridas. En cuanto a utilidad, han cubierto mis espectativas.

Espero que os gusten como a mi.

Hasta pronto.

domingo, 2 de octubre de 2011

Asi Mejor

La Verdad es que cuando trabajas con bata parece que todos vamos iguales...¡y es que verdad!. Salvo que te las hagan a medida, todas son blancas y sosas. Pues eso se va a acabar:


Personalizar una prenda, en este caso una bata de laboratorio, es lo que hace que sea diferente y propia. Y solo necesitas un poco de imaginación, e hilo y aguja.

Animate porque esto es bordado pero hay infinidad de posibilidades.

¡Hasta pronto!

¡¡Por Fin Está Aquí!!

¡Por fin está aquí!

Ya tego mi cámara y es muy chula. Además, venía el kit completo:


Con todo esto ya creo que puedo ponerme en marcha para sacar, como dije, entradas los fines de semana.

Gracias por haberme tenido paciencia en este aspecto.

¡¡Hasta pronto!!